Estas palabras nos recuerdan que Dios tiene un plan para nosotros, que podemos ir a Él en búsqueda de descanso y que no debemos preocuparnos en exceso por el futuro. En tiempos de tristeza, estas promesas divinas nos sostienen y nos dan la fuerza para seguir adelante.18 Aunque recibí todo lo que me mandaron. Tengo todo lo que necesito y hasta t